sábado, 17 de mayo de 2008

El pecado de Eva


El pecado no fue comer de la manzana, sino creer que debía compartir con Adán exactamente todo lo que ella había probado, todo lo que iba aconteciendo, por el miedo de seguir su camino sin la ayuda de alguien. (Indefensión aprendida)

2 comentarios:

Eva dijo...

Creo que las mujeres en general somos muy propensas al desvalimiento adquirido por razones sociales. Solemos establecer sin pretenderlo trampas mentales en las que irremediablemente acabamos cayendo.

Amelie Poulain dijo...

Aiss me temo que es cuestión de cambiar ése chip cultural que nos insertan en fábrica: Omnipotencia para los demás (yo puedo con todo, carros y carretas). Impotencia para sí mismas (sin ti no soy nada).